Tan soberanas
las miradas de reojo
se buscan revoloteando
de tanto en tanto
Los párpados seducen como carnada
abren un descansado paseo
por los dominios, fachadas
y arcos de tus iris
Entre infinitas idas y vueltas
las inquietas pupilas se descubren
en este par de instantes
nos guíamos mutuamente
hacia gestos de complicidad
Me esquivo, me encuentro y desencuentro
busco con cada mirada
llegar a palpar todos los aromas
que me acarician
cuando transcurren tranquilos
momentos de acallar el frío
mi cuerpo que temblaba
encontró tu calor y tu descanso
El deseo con sus impulsos
me dicta lanzarme a tu beso
ábrase esa puerta ahora mismo
y abracé la boca con colores
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario